miércoles, 25 de febrero de 2015

Grecia como ejemplo de nada

Con independencia de lo que ocurra, finalmente, en el particular juego del gallina que ha vuelto a plantear el Estado heleno al resto de sus socios comunitarios, Grecia debería ser expulsada de la zona euro cuanto antes, ya que ha demostrado sobradamente que es un cáncer mortal para el presente y el futuro de la Unión Monetaria.




Imagínese por un momento que la estructura de la moneda única es una comunidad de vecinos, con sus reglas, obligaciones y facturas. Atenas, en este caso, sería el típico inquilino ruidoso y maleducado que, no contento con molestar al resto con sus fiestas nocturnas durante los fines de semana, se niega a pagar los recibos de la comunidad, al tiempo que mantiene un alto nivel de vida a costa, eso sí, de pedir dinero a los bancos. Sin embargo, cuando el director de su sucursal, consciente de que la deuda pendiente jamás será devuelta, decide cerrarle el crédito, el vecino griego, lejos de reducir los suntuosos gastos y trabajar más horas para incrementar los ingresos con el fin de abonar sus facturas e ir amortizando deuda, decide amenazar al resto de propietarios con quemar el edificio para que sean ellos quienes sufraguen todos sus recibos e incluso se hagan cargo de la deuda pendiente con el banco.

Si esto le sucediera a cualquiera de ustedes en la vida real, lo lógico y razonable es que acudieran de inmediato a la comisaría más cercana a denunciar a ese sinvergüenza con el propósito de echarle a patadas del edificio, previa reclamación de daños y perjuicios. Pero, al tratarse de un Estado, parece que está todo justificado, cuando, en el fondo, la analogía es casi idéntica.

Lo que están haciendo los griegos no es más que un deleznable ejercicio de extorsión al resto de europeos para seguir viviendo de prestado cómodamente a costa del dinero de los demás. De hecho, el chantaje heleno es, si cabe, aún más sangrante por las siguientes razones.
 
 
 

 

1. Porque es el peor pagador del mundo

Grecia es, de lejos, el peor pagador del mundo. Desde que logró la independencia a principios del siglo XIX, el Estado heleno ha quebrado un total de seis veces y se ha pasado casi la mitad del tiempo, más de 90 de los últimos 190 años, en situación de quiebra o en pleno proceso de reestructuración de deuda (alargando vencimientos y abonando menores tipos de interés) para, al menos, poder devolver parte de los préstamos a sus acreedores.
 
 

Dicho de forma simple y llana, los políticos griegos (y, por extensión, los votantes que los apoyan) son unos caraduras y unos morosos empecinados. Así pues, no se trata de algo puntual, un impago sobrevenido por culpa de una fuerte crisis o un período excepcional de inestabilidad política y social, sino de un mal comportamiento recurrente, consistente en quebrantar, una y otra vez, la palabra dada y los compromisos adquiridos.

2. Porque nunca ha cumplido las reglas del euro

Lo grave es que esta actitud indecente no se ha visto reducida un ápice tras su introducción en el euro, ni mucho menos. El Gobierno heleno entró en la moneda única haciendo trampas, ya que maquilló sus cuentas públicas mediante una compleja ingeniería financiera para reducir de forma artificial y maniquea su déficit y su deuda pública. Y una vez dentro, aprovechó los bajos tipos de interés y la abundancia de crédito barato que le propició el paraguas de la Unión para disparar su gasto público, ocultando bajo la alfombra parte de su insostenible endeudamiento a base de mantener e intensificar sus vergonzosos artificios estadísticos.
 
 
 

Además, Grecia jamás ha cumplido sus deudas más básicas de la moneda única. Esto es, el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que obliga a los estados miembro a registrar un déficit máximo del 3% anual y deuda máxima del 60% del PIB. Es cierto que muchos países han incumplido este principio esencial de prudencia presupuestaria, pero Atenas se lleva la palma, ya que su agujero fiscal se ha situado en una media del 7,2% entre 2000 y 2010, mientras que su deuda ha superado ampliamente el umbral del 100% del PIB.

¿Y en qué han gastado toda esa ingente cantidad de dinero? En financiar una estructura estatal elefantiásica, caracterizada, entre otras cosas, por su extendida corrupción funcionarial, su profunda podredumbre política y sus amplias redes clientelares. Más de la mitad de la economía griega dependía, de una u otra forma, de maná estatal, pero, a diferencia de otros países, su desbocado gasto público se financió a base de deuda, sin necesidad de contar con una economía competitiva capaz de crear la riqueza suficiente como para sostener ese pesado edificio público en pie.

Así pues, el origen de la tragedia griega, muy al contrario de lo que defienden Syriza o Podemos, no radica en la pretendida austeridad, sino en su desbocado e insostenible sector público. Grecia fue el país de la UE que más aumentó su gasto público real (un 80% entre 1996 y 2008) y su deuda pública (un 400% superior a sus ingresos públicos en 2011) durante los felices años de la burbuja crediticia.

3. Porque no quieren pagar

En la actualidad, su deuda asciende al 175% del PIB. Muchos se agarran a este dato para explicar que su devolución es imposible, justificando así la necesidad de aplicar una nueva quita, tras las dos reestructuraciones aplicadas durante la presente crisis. El problema, sin embargo, no radica en su pesada deuda, ya que Atenas disfruta de unas condiciones financieras más ventajosas que España e, incluso, la todopoderosa Alemania, sino en su ausencia total de voluntad para cumplir lo pactado.
 
 

Grecia puede pagar, pero no quiere. He ahí el drama. Y la prueba más evidente es la elección de Syriza por parte del pueblo heleno, un partido de ideología comunista, cuyo programa pretende repetir punto por punto la ruinosa senda de despilfarro público, improductividad económica e irresponsabilidad política que les ha llevado directos a la quiebra.
 
 

De poco sirve que el acreedor facilite los pagos o condone parte de la factura pendiente si el deudor no tiene intención alguna de pagar. Mantener las reformas y la sana, aunque impopular, senda de austeridad que exige la troika es la única fórmula viable que existe para amortizar la deuda, ya que la finalidad última del famoso memorando de rescate es que Grecia registre superávit fiscal y superávit exterior.

4. Porque pretenden vivir a costa de los demás

Los griegos, sin embargo, pretenden justo lo contrario. Su intención no es otra que regresar al perverso e insostenible círculo de endeudamiento previo  solo que, ahora, a costa de los contribuyentes europeos, ya que los inversores, con toda la lógica del mundo, no se arriesgan a seguir prestando dinero.
 
 

Lo que está exigiendo Atenas, básicamente, es un cheque en blanco para gastar a placer la riqueza que generan los socios ricos del norte. Es decir, robar, chantajear y extorsionar al resto de europeos bajo la amenaza de desatar el caos si son expulsados del euro.

5. Porque no se lo merecen

Pero, más allá de datos y cifras concretas, Grecia no se merece estar en el euro por la sencilla razón de que su pueblo no comparte los principios y valores más básicos de la UE: democracia, libertad y derechos humanos.

Basta observar los últimos resultados electorales para percatarse de esta triste realidad. Más del 50% de los votos ha ido a parar a formaciones de perfil totalitario y liberticida, como es el caso de Syriza, el Partido Comunista, los nazis de Aurora Dorada o los nacionalistas radicales de Griegos Independientes. Formaciones que, en mayor o menor medida, se declaran abiertamente antieuropeístas.
 
 

En definitiva, si Grecia no quiere pagar sus deudas, no quiere cumplir las reglas del euro y, además, reniega de la UE, ¿qué razón hay para que se quede? Ninguna. Grecia debe salir por su propio pie o, directamente, ser expulsada. Nadie obligó a los griegos a aceptar el euro y, por tanto, son libres de marcharse. Lo que no tiene sentido y, además, resultaría injusto, aparte de suicida, es que el resto de estados cedan al chantaje de unos trileros y manirrotos con nuestro dinero.

 

miércoles, 18 de febrero de 2015

Explotación laboral y nivel empresarial de España

Cualquiera que me conozca o haya leído cuatro líneas de este blog sabrá de sobra que disto bastante de ser ningún revolucionario comunista  ni ningún marxista ateo de estos de puño alto, de la lucha de clases y del enemigo es el patrón al estilo Podemos-IU. Para nada.




 
Como persona de derechas que soy defiendo a capa y espada la iniciativa y la propiedad privada, y defiendo que una empresa no es una ONG (de hecho cuánto se podría hablar de cuánto dinero pillan muchas ONGs y cuánta gente vive de ellas, algunos bastante bien por cierto).

El que monta una empresa arriesgando su patrimonio y su dinero es totalmente lógico y lícito que quiera ganar dinero, cuanto más mejor y que además (estaría bueno) gane más dinero el dueño de la empresa que sus empleados.
 
 

 
Ahora bien, lo de ganar dinero y cuanto más mejor tiene unos límites éticos y morales. Un empresario no puede forrarse a costa de tener una plantilla formada en su 90% por becarios que no cobran salario alguno y cada seis meses renuevo la plantilla entera. Un empresario no puede forrarse a base de cubrir puestos de trabajo fijos con trabajadores provenientes de empresas de trabajo temporal para echarlos sin un duro cuando te parezca. Un empresario no puede forrarse a costa de tener a cuatro trabajadores extranjeros que no los tiene ni dados de alta en la seguridad social para ahorrarse un dinero que va directamente a su bolsillo. Un empresario no puede forrarse a costa de pagar sueldos tercermundistas a los trabajadores excusándose en lo mal que está todo cuando él cambia de Audi o de Mercedes cada año y manda a sus hijos a estudiar a EEUU. Un empresario no puede forrarse a cualquier costa. Y eso está pasando en España.
 
 
 

El número de ricos ha crecido con la crisis. Es un dato, un hecho, no una opinión. El sector del lujo ya ha dejado atrás la crisis, es otro dato.

La falta de humanidad que estamos viendo en esta crisis es para replantearse si quizás Dios no debería mandar otro diluvio universal.

Yo normalmente he creído siempre y así me lo han transmitido en casa que las desgracias unen a las personas, a las naciones, a los pueblos, que sensibilizan a las personas. Pero en los tiempos que vivimos ya ni eso. Sálvese quien pueda y si por el camino te puedo robar la cartera mejor que mejor.
 
 
 

Una de las cosas que más me repugnan de España es el empresariado que existe, la “casta” empresarial” en clave de Podemos.
 
 
 

Salvo honrosas excepciones el empresario español, a diferencia de otros empresarios en el resto de Europa, jamás ha buscado levantar un negocio para crear prosperidad o puestos de trabajo, innovar u ofrecer algo distinto. No. El empresario medio español invierte y crea un negocio con un único fin: forrarse él mismo pasando por encima de quien sea y ganar dinero, mucho dinero a toda costa sin importar los muertos que caigan por el camino. Y esto es intolerable y deja a las claras porqué en algo tan importante como es el trabajo estamos como estamos. De hecho la prueba del algodón de esto que digo es la situación actual. No hay apenas empresas en España que se dediquen a eso que hoy llaman I+D, investigación y desarrollo para los aldeanos como yo. ¿Por qué? Pues porque en España todo kiski se subió en la burra del ladrillo que era lo que daba dinero a espuertas, todo lo invirtieron en la construcción y el pelotazo y salvo cuatro pelagatos nadie se ocupó de montar una empresa que fuese competitiva el día que la burbuja llegase a su fin, algo con lo que ser competitivos, fabricar tal componente o tal producto que no fuera algo relacionado con la construcción. Entre montar una inmobiliaria, una constructora o una empresa que innovara en algo diferente se montaba siempre a inmobiliaria o la constructora. Es una prueba más que fehaciente de lo que denuncio. Se abrieron negocios y crearon empresas con un único fin: forrarse. No por iniciativa o vocación empresarial. Esto es como el que jamás había visto una carrera de Fórmula Uno y cuando el boom de Fernando Alonso no se movía del sofá desde las 8 de la mañana y se compró el polo, la gorra y todo el merchandising habido y por haber de Fernando Alonso. Ese espécimen en el fondo se sube a la moda del momento pero el deporte o la Fórmula Uno le importa un carajo.
 
 
 

Para forrase estos tipos no dudan en utilizar todas las trabas burocráticas y vacíos legales aprovechándose de las leyes repugnantes que tenemos, e incluso saltarse la ley si es menester.

 Siempre, y lo digo con la mano en el corazón he admirado profundamente a las personas que inician un negocio, que arriesgan su dinero, sus escasos ahorros y su patrimonio y trabajan de sol a sol siete días a la semana para levantar un proyecto, y digo siete porque si la semana tuviese nueve días trabajarían nueve días. Sea lo que sea, desde el que monta una empresa de informática de mil trabajadores al que compra o alquila un local para montar una óptica o una panadería donde solo va a trabajar el. Es admirable.
 
 
 

 
La labor social que hace un empresario honesto y leal es impagable y son los que de verdad hacen PROSPERAR con letras mayúsculas a una nación. Es admirable. Y a diferencia de la izquierda cuyo afán es aniquilar la iniciativa privada para que todo el mundo viva del Estado, cobre del estado, si no hay iniciativa privada el estado es imposible mantenerlo incluso a costa de masacrar a impuestos a la sociedad, y con ello los servicios públicos que tanto dicen defender son imposibles de mantener.
En mi casa bienintencionadamente siempre me recomendaron y me insistieron (porque es lo que a ellos les inculcaron) que para vivir bien me metiese en algo del Estado y a vivir la vida. Nunca dudé de la buena fe de mis padres pero con esa mentalidad el país se hunde si resulta que el afán de todos los jóvenes es ser funcionarios. Con esto tampoco quiero decir que esté en contra de lo público, pues soy firme defensor de los servicios públicos.
 
 
 

Hay que fomentar la iniciativa privada, dar todas, absolutamente todas las facilidades para que la gente monte su negocio, para que no cierre el que atraviesa un bache, para que le vaya bien, para que tenga crédito a un bajo interés, para que así contrate a personas y baje el paro. Pero claro, te encuentras con Rajoy y con Montoro y qué negocio vas a montar si te van a moler a impuestos, a trabas burocráticas, a leyes y normativas absurdas, a millones de papeles, de licencias, y todo pagando, pagando y pagando. Y eso un gobierno que dice estar a favor de la iniciativa privada…..
 
 
 

 
Por desgracia el empresario medio español siento decirlo así no es alguien honesto y comprometido socialmente. El empresario medio español prefiere contratar a inmigrantes por puro interés de explotación antes que a españoles aunque haya 6 millones de nosotros en el paro. El empresario medio español aprovecha todos los resquicios que tiene la ley para hacer la trampa, para pagar menos al trabajador, para quitarte las vacaciones, para escamotearte la paga extra, para ahorrarse 6 euros si hace falta.
 
 
 

 

Una de las cosas que he defendido siempre es de qué coño vale tanta democracia, tanta ley, tantos derechos humanos y tanto papel mojado si lo más elemental en la vida de una persona como es tener un trabajo digno y estable es negado. El trabajo…derecho…¡y obligación! Y como dice la Biblia: el que no trabaje que no coma. Qué bonito estar poner en la Constitución cosas que no puedes cumplir.

 

Que gente con carreras esté condenada al paro, a trabajos de telefonista, de manipulador de alimentos o de mozo de almacén con contratos por días o por semanas cobrando auténticas miserias y en unas condiciones tercermundistas da una imagen clara del nivel empresarial que tenemos, de la usura y la avaricia. Y no necesariamente hablo de un tallercillo en un polígono, que también, sino de grandes empresas internacionales cuya falta de escrúpulos es vomitiva. Vienen a España porque estamos de liquidación y a eso nuestros políticos le llaman inversión, lo llaman confianza. A otro perro con ese hueso.
 
 


 

Me comentaba ayer un familiar que a una amiga suya la habían contratado de ayudante de la ayudante de recepción de un hotel por 400 euros al mes tras pasar tres entrevistas y pedirla una carrera y tres idiomas (español, inglés y alemán). Es para cogerle al empresario con un látigo y empezar a darle en la espalda hasta que suplique perdón y cuando suplique perdón ponerle a él a trabajar por 400 euros para que sepa lo que hace a los demás.
 
 
 

Conozco casos de personas que con carreras y dos y tres idiomas han estado trabajando 12 y 13 horas al día por sueldos de 600 euros.

 

Hoy por enésima vez me he dado una vuelta por mi ciudad echando curriculums en las malditas Etts que las odio con saña. El panorama es para echarse a llorar o directamente con los pocos ahorros que uno tenga irse de España. Un horario limitado para dejar el curriculum. Si llegas 5 minutos antes o 5 minutos después de ese horario no te atienden, y eso que vas a ofrecerte, que con tu trabajo van a ganar un dinero de lo que ellos viven. Allí he podido ver a un chaval joven que decía que su último trabajo ha sido en una sala de apuestas pidiendo el DNI en la entrada. Un señor que estimo en unos 50 y pico años con chándal pidiendo trabajo. Le he visto el curriculum al señor y era un folio por una cara que le sobraba media hoja, y he pensado para mi: seguro que este pobre hombre es el típico que llevaba desde los 14 años trabajando en un sitio, con la crisis o han cerrado o le han echado y teme no volver a trabajar nunca más. No me quiero ni imaginar la situación de estas personas. He pasado también por la oficina del Inem y parece aquello la oficina de extranjería. He sentido asco. Todo lleno de dominicanos, peruanos, etc…con el agravante de ir con unas pintas de gentuza que dan ganas de meterlos en un barco a todos y mandarles a tomar por culo de aquí donde sea.
 
 
 

 
Y ante esta banda de gentuza, de explotadores y de sinvergüenzas protegidos por PPSOE uno casi que acaba pensando como un bolchevique de Podemos y acabe deseando que las tornas cambien algún día y que esta gentuza que con la crisis han aumentado su patrimonio, su poder adquisitivo aprovechándose de la necesidad de la gente acaben pidiendo, suplicando bondad y misericordia. La misma que tienen ellos a la hora de ROBAR el dinero a un trabajador amparándose en la crisis o de echarle a la puta calle porque un día ha llegado cinco minutos tarde o simplemente porque he venido de malas porque he discutido con mi mujer.
 
 
 

He estado en empresas donde el 80% de la plantilla era trabajadores temporales de ETT (yo también), donde a las chicas que llegaban nuevas según como tuvieran el culo y las tetas las dejaban un par de meses antes de echarlas o a la semana las echaban diciendo a la ETT que no trabajaban bien, y en la ETT evidentemente a esa persona se la pone una cruz, lo cual te inhabilita para volver a trabajar allí. Pero a ellos que les importa. Además no te echaban diciéndotelo allí a la cara, en persona. Ni para eso tienen valentía. Esta gentuza llaman a la ETT y les dicen: que fulano no vuelva mañana, y ellos te llaman para decirte: nos han llamado que ya has terminado. Y si tienes un hijo como si tienes tres y una hipoteca como si te van a desahuciar si no pagas. A nadie le importa absolutamente nada, no hay misericordia.
Lo extremadamente  grave es que a veces no es el propio empresario el que comete estas atrocidades sino los propios trabajadores, curritos como tú que están medio peldaño por encima de ti, el encargado o encargaducho que gana 100 euros más que la última mierda de la empresa. Auténticos negreros, perros de presa del empresario, buitres de turno. Como bien dice mi padre todos estos jefes y empresarios déspotas necesitan de esbirros para imponer su ley. Hitler o Stalin los tenían. Por ejemplo entre los judíos que eran encerrados, masacrados y maltratados había guardianes judíos que los maltrataban, que a cambio de hacer como chivatos o como perros de presa recibían medio mendrugo de pan de premio y algunos privilegios. Estas cosas están pasando hoy en el mundo laboral donde compañeros de trabajo que están a tu lado son perros de presa del empresario. Ojalá algún día todo el mal y el dolor que han causado les sea devuelto de la peor manera posible. Yo lo he sufrido con creces.
 
 
 

Ante este panorama de odio, de falta de todo casi pide uno a gritos un paredón de fusilamiento.

 

Hay empresas, lo digo a modo de ejemplo para ver hasta dónde llega la vileza y la inteligencia de los que mandan, donde para dividir a la plantilla (divide y vencerás)  tienen diferentes bandas salariales. Hay tres o cuatro que cobran bien o muy bien y el resto cobran una basura en condiciones deplorables sufriendo el abuso del empresario. ¿Qué te niegas a hacer el trabajo? Despedido y llega el que cobra pasta y lo hace, que en el fondo es un sumiso bien vendido que actúa como decía anteriormente como perro de presa. Y así se aseguran la división dentro de la plantilla y la seguridad que no se van a poner de acuerdo para hacer una huelga, porque algunos sí tienen mucho que perder.
 
 
 



El vivo ejemplo del empresario sinvergüenza sin escrúpulos que retrato es Díaz Ferrán. Un individuo sin escrúpulos que mientras se declara en bancarrota vive forrado con sus miles de millones bien a salvo fuera de España sin pagar a hacienda, que no paga a los trabajadores de sus empresas porque no le da la gana (viajes Marsans), que se ríe de todo y de todos porque se cree por encima de la ley y no contento con ello se permite hacer observaciones como decirnos a los españoles que para salir de la crisis hay que trabajar más y cobrar menos. Claro, y tú mientras te quedas con una buena tajada, que listillo. Díaz Ferrán sin duda es el vivo ejemplo del clásico empresario español que ha arruinado España por su avaricia desmedida de tener más y más dinero a base de ganarlo pasando por encima de familias, desahucios y sabe Dios qué más. Si tan cristiano es como se le veía en la tele espero que Dios le haga buena justicia.
 
 
 

 

Amancio Ortega. Es cierto, creó Inditex de la nada. Se hizo a sí mismo, en cierto modo es un ejemplo de muchísimas cosas. Todo esto me parece genial, pero ahora digo yo: una vez que la empresa cada año gana más dinero que el anterior, va como un tiro, tienes más dinero del que jamás vas a poder gastar, ¿no sería un bonito detalle ganar un poco menos y fabricar la ropa en España en vez de hacerla en Taiwán o Vietnam? Si, sería un bonito detalle……Y Amancio Ortega es cierto que da mucho dinero a Cáritas, que en sus empresas existe la llamada “paga Amancio” que es un dinerillo que da por su cumpleaños a los trabajadores, que la gente come casi gratis en los comedores que hay en sus empresas, y más cosas. Lo agradezco, pero creo que se podría hacer mucho más que dar limosna del bolsillo.
 
 
 


Y ante este panorama desolador en el que la gente se tira cinco, siete, ocho años en paro sin trabajar y el día que le sale un maldito empleo se encuentra con este panorama ¿cómo la gente no va a votar a Podemos si te están prometiendo el paraíso? Votas a lo que sea con tal de echar a los que han hecho esto. Votas con  odio, con ganas de venganza. Cuando la gente no tiene nada que perder vota a la desesperación y cree al primero que pasa por delante aunque este sea un payaso comunista charlatán con coleta, y aquí he de hacer un inciso: si Podemos tiene 7 u 8 millones de votos que nadie se haga trampas al solitario pensando que en España hay 7-8 millones de ultras de extrema izquierda o de perroflautas. En absoluto. Es que hay tal cantidad de personas hundidas, desesperadas que van a votarles por desesperación deseando que las cosas cambien.
 
 
 
A lo mejor es el mundo de la fantasía en el que sueño, pero que bonito sería vivir en un mundo donde la figura del empresario fuera respetada y venerada porque este diese trabajo a la gente, repartiese beneficios y en definitiva sembrase prosperidad para el futuro. Qué bonito sería que en vez de racanear 100 euros a los empleados excusándose en que los beneficios no dan para más un empresario en vez de comprarse un coche con 30 extras se lo comprase con 10 y el resto del dinero lo repartiese entre sus trabajadores, pues no olvidemos que sin los trabajadores la empresa no es nada.
No quiero decir tampoco que todos los empresarios sean de este tipo, pues hay muchísimas empresas y pequeños negocios haciendo esfuerzos muy grandes por mantenerse a flote y no cerrar dejando a muchas personas sin trabajo. Lo se de buena mano, donde incluso el jefe o dueño ha puesto no dinero, sino mucho dinero de su bolsillo, de su familia, para seguir pagando a los empleados quedándose él sin cobrar muchos meses.
 


 
Yo he podido ver la película desde ambos lados.

Tampoco vamos a demonizar la figura del empresario presentando al trabajador como alguien angelical, honesto, un represaliado,  pues tengo claro que la inmensa mayoría de los asalariados si estuvieran ellos dirigiendo la empresa a lo mejor serían aun más usureros, avaros  y déspotas que el dueño al igual que todos los que despotrican en el bar y en la calle de la corrupción si fueran ellos los que tuvieran acceso a la caja del dinero se llevarían lo mismo o incluso más.


 

 

Yo si fuera presidente del gobierno tras acabar con el sistema autonómico y cerrar el grifo al despilfarro y al nacionalismo lo siguiente que haría sería reunir al empresariado y hablarles claro: “Vais a tener todo mi apoyo para levantar esto, pues sois vosotros creando empleo los que tenéis que levantar esto para sacar a España de la inmundicia. Por mi parte todo mi apoyo en forma de medidas, ventajas fiscales y bajadas de impuestos, pero como no cumpláis con vuestro compromiso y os dediquéis a llenaros el bolsillo yo saldré de la Moncloa con los pies por delante, pero vosotros salís con los pies por delante de España”.


 

 
Ya está bien de robar a los trabajadores, de escurrir el bulto, del ninguneo y el desprecio sistemático, de la humillación permanente, de la trampa, de la estafa, del reírse en tu cara con total impunidad.

Gran parte del problema que tenemos en España aparte del político y de los propios españoles es por culpa del empresariado y de su falta de ética. Podemos hablar de los problemas políticos, de las mil leyes absurdas, de los impuestos, de la crisis. Podemos hablar de todo ello, pero nada de eso justifica tratar así a las personas. Nada justica tratar a personas como si fuera pura mercancía y a veces ni eso, pues qué te partas una pierna o un brazo al empresario no le importa, que se le rompa una televisión sí le importa mucho. Nada justifica llamar a un chaval a las diez de la mañana para que se vaya corriendo a trabajar a descargar camiones y a las 12 le eches porque te has quedado sin trabajo.


 

 
España más que nunca necesita empresarios con mayúsculas, emprendedores. Gente dispuesta a dar lo mejor de sí mismas no con la idea número uno de forrarse para tener cientos de millones, sino para crear un tejido empresarial, crear empleo de calidad, crear, en definitiva PROSPERIDAD PARA UNA NACIÓN. Para ello es indispensable que existan unas políticas estatales propicias que fomenten todo esto, además de eliminar de raíz todo el entramado burocrático que arruina cualquier iniciativa empresarial.


 

Mientras no existan grandes empresarios que prefieran quedarse en España, producir en España, pagar impuestos en España y dar trabajo a los españoles a costa de ganar menos dinero sacrificando una parte de sí mismos y su dinero para salvar a España mucho me temo que es matemáticamente imposible que salgamos de la crisis cuando las grandes empresas se han marchado todas fueras y lo único que mantenemos es la empresa del automóvil, y a base de subvención y de chantaje permanente. Ya sé que si el teléfono móvil se fabrica en China se fabricase en España en vez de 200 euros valdría 500 euros, pero precisamente si se fabricase en España dando trabajo a los españoles a lo mejor sí tendríamos 500 euros para gastarnos en un móvil.


 

España necesita imperiosamente empezar a inculcar desde niños como sucede en EEUU la cultura empresarial. Hay que barrer la idea de que lo mejor es ser funcionario. Hay que dar valor de qué significa ser empresario. De que ser empresario no es vestir de traje, tener un despacho cojonudo y llegar a la oficina a las diez de la mañana en un coche de lujo con gafas de sol porque no sabes ni el dinero que tienes en el banco. Como me dijo un profesor de universidad, ser ingeniero no es pasearte por la fábrica con americana y zapatos y cobrar el triple de dinero que el resto a final de mes.


 

Yo con la crisis veo que la cultura empresarial, la iniciativa privada ha aumentado. La gente está echándole valor y coraje para, contra viento y marea, contra la crisis, contra el desánimo, contra Montoro y Rajoy, levantar negocios como el que tiene un hijo. La gente alquila un local, tiene una idea, invierte su dinero, trabajan como burros, todo para salir adelante.
 
 


 

Ayer por la tarde dando un paseo por un barrio de mi ciudad con mi abuelo en una calle he podido ver una tienda de tarimas y suelos, otra de vestidos de novia, dos de informática, un dentista, varios restaurantes-bares-cafeterías, una tienda de pinturas, una carnicería, una pastelería, un minigimnasio, una clínica de fisioterapia….Algunos negocios de estos que he citado llevan tiempo abiertos, otros son nuevos, señal que la gente quiere vencer las adversidades de la vida, que la gente quiere salir adelante, no hundirse en el desánimo, que si nadie te da trabajo créalo tú. Por el contrario con bastante tristeza he podido ver otros muchos locales cerrados a cal y canto donde había otros negocios, algunos bastantes longevos, que han cerrado arrasados por la crisis.


 


La cultura empresarial debe de cambiar, y mientras el objetivo número uno del empresario sea llenarse los bolsillos de dinero a cualquier precio….seguiremos como estamos, o sea mal. La riqueza seguirá en manos de unos cuantos déspotas malnacidos que son los que seguirán manejando el tinglado como el que juega a la Playstation. La planta de Navarra la cierro, 300 a la calle. Esto lo subcontrato a esta empresa china y me ahorro 800.000 mil euros al año, y en la nueva nave que vamos a abrir en Toledo salvo cuatro el resto todos de Ett y como muchos seis meses en la empresa y luego fuera.

 

Quizás la solución (utópica solución quizás) radique en que cada parte del puzle, trabajador y empresario, obrero y patrón, asuma cada uno su responsabilidad, su rol y sus obligaciones y deberes honesta y lealmente como decían José Antonio Primo de Rivera.


 

 
El empresario no puede ser un déspota sin escrúpulos cuyo único objetivo es hacerse millonario. Y el currito no puede seguir con la eterna aspiración de exigir lo que no está en la mano del empresario, y trabajar poco y cobrar mucho.

 

Algunos dirán que es imposible que haya un empresario como el que a mi me gustaría que lo hubiese. Mentira, esos empresarios los hay, y hay muchas más personas que hacen cosas altruistamente. Quizás no se base en que el empresario sea una persona altruista, pero al menos sí más generosa y más humana.

 

 
Don Santiago no cobró nunca del Madrid. Ni como futbolista, ni como directivo.
«Si fuera verdad que soy tan buen empresario me hubieran salido proposiciones para regir otras empresas. Yo estoy aquí porque es gratis, y en el fondo nadie quiere hacerse cargo de las cosas que son gratis». Le bastaba el afecto del club y puede que ni siquiera eso. «Yo he trabajado siempre por el ideal, no por ganar dinero. La gente no comprende la modestia, la humildad, el sacrificio. ¡Hombre, por favor! ¡Por amor de Dios!... ¿Y el ideal? ¿Dónde está el ideal?».

Ahí quedó definido un hombre. Y su empresa.

Hablo, naturalmente, de Don Santiago Bernabéu.


 

 

viernes, 13 de febrero de 2015

Francisco Franco




Para algunos (los de siempre) un criminal sanguinario, dictador y falto de moral, de ideas y de escrúpulos. Para otros muchos donde me incluyo sin ningún género de dudas Franco fue el hombre que primero salvó a España del marxismo y el comunismo que sabe Dios en qué habría terminado aquello con la Segunda Guerra Mundial a la vuelta de la esquina (y sin ella) y luego dirigió los destinos de la Patria hasta alcanzar un estado de bienestar desconocido hasta entonces en España y que hoy está en serio riesgo de desaparecer sacando a España de la inmundicia y del pesimismo y el derrotismo de siglos atrás.

De hecho, apartándome momentáneamente del tema, creo que aquello que se levantó con tanto sufrimiento le quedan desgraciadamente los días contados porque el mundo camina “hacia otra cosa”. No sé si serán cinco años, diez o veinte, pero que la España que conocemos y que hemos conocido, con los servicios sociales y públicos que tenemos de paro, seguridad social, pensión, trabajo fijo y estable, etc… la mayoría heredados del franquismo van a desaparecer, no me cabe ninguna duda. Es el mundo fantástico y maravilloso que nos espera.
 
 
 

O sea, aquello que se consiguió en el franquismo con sangre, sudor y lágrimas, a saber: un trabajo PARA SIEMPRE, una vivienda digna, poder tener una familia, una pensión, unos servicios sociales que hoy día vemos como algo normal, todas esas cosas me da la impresión (es algo personal) que las podemos ir diciendo adiós. Los servicios sociales serán mínimos, los trabajos prácticamente temporales porque ya ser fijo apenas vale nada y todo ello llevará a una inestabilidad personal de no poder tener nada fijo en la vida.

Por cierto una puntualización al respecto. Me hace gracia cuando ves a multitud de personas hablar de los recortes como “todo aquello que nos costó tanto conseguir que nos los están quitando”. En verdad aunque no lo digan o ni siquiera se den cuenta de ello están atacando a Franco, pues de fondo lo que quieren decir es ”después de 40 años de dictadura horrible de no tener nada y que con la democracia y la transición consiguiéramos tantas cosas ahora nos lo están quitando todo los herederos del franquismo encarnados en el PP”. Todo mentira. Ni el PP es el heredero del franquismo ni de lejos ni con Franco no había nada de aquello, eso lo sabe cualquiera con dos dedos de frente pero la mentira oficial ha calado, y de qué manera. El Cuéntame ha hecho sin duda muy bien su labor.

 
Me hace también gracia cuando en una actitud deplorable, ventajista y manipuladora ciertas personas, muchos de ellos autodenominados como élites culturales superiores al resto, queriendo o sin querer se atreven a juzgar hechos pasados con la perspectiva del presente. Es algo que me repugna. Y con la perspectiva del presente se atreven a juzgar el franquismo, se atreven a juzgar el Alzamiento Nacional, la guerra civil, la División Azul, las decisiones de aquel entonces. Es algo que me saca de mis casillas, me parece tan sumamente deplorable, injusto y ventajista como aquel que le oyes por la calle decir “es que si es ahora me levanto y le meto un tortazo…”. No perdona, si es ahora te vuelves a callar y agachas la cabeza como hicistes en su momento, pero es que a toro pasado todos somos muy valientes. Los hechos hay que juzgarlos bajo la situación política y la mentalidad de aquel entonces. Y si no eres capaz de entenderla en toda su extensión sencillamente cállate que estás más guapo.

 

Perdón me he apartado del tema a tratar.

Volviendo al tema. Francisco Franco ha sido en vida el personaje más admirado, querido y respetado que ha conocido España. Es algo que sus enemigos, que en el fondo son los enemigos de España, no soportan. Se le pueden criticar muchas cosas y por supuesto, faltaría más, admito la crítica y las diferentes opiniones y posturas, pero no bajo la mentira, la calumnia y la manipulación. Por ahí no paso. Y los que critican a Franco muchos de ellos siempre lo hacen desde la mentira, la demagogia, el oportunismo, el desconocimiento, la manipulación y el sectarismo ideológico en todos sus niveles conducidos por la impotencia y el odio de los derrotados que saben que ya no pueden hacer nada salvo ensuciar su imagen, que no es poco.
 
 
 

No soportan que aquel señor bajito al que llaman dictador que no era más que el Jefe del Estado de un Régimen autoritario que no dictatorial, respaldado por la inmensa mayoría de los españoles mediante votación fuera aclamado y venerado por millones de ciudadanos, que fuera recibido con vítores, aplausos y admiración allá donde iba. No lo soportan y de ello no hablan. No hablan de la austeridad en la que vivía. Hablan manipulando la verdad que fue que murió en una cama de un hospital. Cierto, murió en una cama de un hospital de la Seguridad Social bajo el cariño de la inmensa mayoría del pueblo español y preocupado, con una lucidez asombrosa, por los problema que aquel entonces había en España que no eran pocos precisamente. Escribí una entrada titulada “Así murió Franco” donde lo relato.
 
 
 

De eso y de todas las cosas que no tienen ni medio argumento no quieren hablar, pero yo sí quiero hablar. En cambio igual que digo que Franco ha sido el personaje más querido en vida ha sido a su vez el más odiado una vez muerto. Ver para creer.

Acumuló más poder del que nadie jamás haya tenido en España, ni tan siquiera Felipe II. Al contrario que otros muchos que lo usaron para forrarse, para tener sus harenes en palacio repletos de mujeres o para hacer su santa voluntad a su interés personal Franco jamás abusó de ese poder. Ni fue mujeriego, ni vivió a todo trapo. Comía lo mismo que se hacía para todos, lo cual dice bastante de él.
 
 
 

Los cansinos antifranquistas de siempre, 40 años después de su muerte siguen erre que erre con los crímenes del franquismo, con la guerra civil, siguen a vueltas con el Valle de los Caídos. Cada cierto tiempo organizan una cena o una “manifa” para recaudar fondos por las víctimas del franquismo que luego se lo queda chusma como Garzón, salen a la calle periódicamente a seguir manifestándose contra Franco. A mi es que me da risa y asco a la par ver a esta banda de personajillos comunistas indeseables manifestándose contra Franco en el año 2015. Son siempre los mismos y no disimulan nada que tipos de perros son.
 
 
En el fondo necesitan a Franco 40 años después para seguir viviendo del cuento a todo lujo. Necesitan sacarle a pasear cada cierto tiempo para hacerse notar que están ahí. Siempre son los cuatro tontos de los cojones de turno del Psoe, de IU, nacionalistas sindicalistas de rolex y visa oro y los de la zeja no pueden faltar: Toxo y Méndez, el ya expulsado juez Garzón ( el corrupto, al que Franco le ganó la batalla incluso muerto), los Bardem seguidos de los de la zeja de siempre, el Sacristán, el Juan Diego Botto, el Almodóvar, el Guayomin etc…. Vamos, los que perdieron la guerra que ellos provocaron, los herederos que hoy en su mayoría viven como sultanes, los que cometieron las mayores salvajadas y atrocidades conocidas y jamás, subrayo con mayúsculas y en negrita JAMÁS han pedido perdón por lo que hicieron. Los que allá donde han gobernado no han hecho más que dejar un reguero de miles de muertos, de hambre, de miseria y de destrucción. Los que hablan de las víctimas del franquismo pero jamás de sus crímenes y fechorías porque en el fondo se sienten orgullosos de ello y si pudieran lo volverían a hacer. Llevan la quema de iglesias en su ADN. Estos son los que en el año 2015 siguen pronunciando el nombre de Franco sin lavarse la boca. Le necesitan para seguir subidos en la burra. Tienen Franco-dependencia.
 
 
 


La realidad tristemente para ellos es la que fue, no la del Imanol Arias en el “Cuéntame”. Me contaba mi suegro el otro día viendo la televisión cuando echaron el anuncio de la no se cual temporada de Cuéntame que aparte del rollo que es de llevar la torta de años con la serie contando una milonga que no se la cree ni Peter, me comentaba el hombre que se preguntaba si eso que contaban lo había vivido él de joven o si había vivido en otra realidad. Evidentemente todo es una burda manipulación de la historia y mucha gente no pasa por el aro, porque lo que ellos vivieron fue otra cosa. Pero también hay muchas personas que toman eso como una lección de historia interactiva. Lamentable.

 
La realidad es que Franco defendió y fue fiel a la República y su legalidad (la poca que le quedaba) como pocos, mucho más aque aquellos que hoy se siguen envolviendo en la bandera tricolor, y no alentó ninguna insurrección de las muchas que hubo. La realidad es que Franco se sumó al Alzamiento Nacional cuando quedarse fuera de él era casi más peligroso que unirse a él. La realidad es que Franco ya como Jefe del Estado cogió una España en plena guerra civil donde no había un mendrugo de pan que echarse a la boca, una España de alpargata y miseria y dejó una España 40 años después próspera, reconciliada y en paz donde se tiraba comida a la basura y se viajaba en coche (el mítico 600) a la playa de vacaciones. Una España con subsidio por desempleo, con un tejido empresarial tremendo, con seguridad social (no como ahora que los listillos de los socialistas se agencian de ese logro, una seguridad social envidiada en todo el mundo que varios países han intentado copiar). Una España donde los sindicatos verticales trabajaban por el currante y no vivían como Sultanes a costa de ellos, una España donde la gente vivía de su trabajo porque no había paro, había TRABAJO y oportunidades, una España DECENTE donde no se echaban obscenidades por televisión, donde la gente iba a misa y estaba instruida en la moral católica, piedra angular de la sociedad, de nuestras raíces, una España donde se defendía la familia como base de una sociedad. Una España en la que a los delincuentes, asesinos y sinvergüenzas alborotadores se les trataba con mano dura, como debe ser, y no como hoy que no se les puede ni replicar su conducta. Una España donde la paga de verano era llamada la paga del 18 de Julio para que los trabajadores tuvieran un dinerillo extra para las vacaciones. Puedo seguir y seguir y seguir…… Muchas de estas cosas ya las expresé en mi entrada la España de Franco el ayer y el hoy. No hay comparación posible. Pero de esto no hablan como es lógico. Hablan de que no te podías divorciar (hoy tenemos el divorcio express), hablan de que las mujeres abortaban en la intimidad (hoy el aborto es un derecho pagado por todos), hablan de la imposición del catolicismo (hoy tienen barra libre para mostrar su odio y falta de respeto de la que tanto hablan), hablan de ….tantas cosas.




 

Yo para juzgar a Franco y al franquismo a grandes rasgos le juzgo por dos aspectos: uno, motivos que llevaron al Alzamiento, y dos, la España que recogieron y la España que dejaron. En ambas cosas hay una total justificación y no hay discusión posible.

 
Francisco Franco no fue ningún señorito. Franco se hizo a sí mismo. Ganó todo su prestigio luchando en África donde a punto estuvo de morir, de hecho estuvo más cerca del cielo que de la tierra. Durmiendo en el suelo y comiendo cualquier cosa. Así Paquito, aquel chico pequeñajo y enclenque pasó a ser Franco, y de ahí a Generalísimo elegido DEMOCRÁTICAMENTE por todos los generales del bando nacional durante la guerra civil. Consiguió todo el prestigio que tenía con trabajo, valor y honestidad.
 
 
 

Dicen los pedantes que Franco dio un golpe de Estado. Como se puede llegar a decir semejante sandez  sin ponerse rojo. Dicen que durante la guerra movió los hilos para quedarse él en el poder durante y después de la contienda a costa de alargar la guerra civil y el sufrimiento de los españoles durante tres años. Cómo se pueden decir tales estupideces si no es desde la ignorancia y la mente sucia.

Una cosa es cierta: Franco tuvo eso que los moros llamaban Baraka. Una protección especial, una suerte divina, llámenlo como quieran. Y esa baraka le acompaño a Franco toda su vida, desde África, donde llegó a estar más muerto que vivo, hasta su vida como Jefe del Estado. Tuvo ese punto de suerte que todos necesitamos en la vida. De ahí viene el mito de que fue “un enviado por Dios para salvar a España”. Llámenlo X. La realidad es que salvó a España. Yo creo que Franco, enviado por Dios o no, sólo fue un hombre extraordinario con sus virtudes y sus defectos como cualquier ser humano.
 
 
 

También se hace necesario diferenciar al Franco político del Franco militar.

Como militar fue un gran militar, no brillante de 10, pero sí de 8. Franco fue un gran militar indudablemente demostrado en África y en la guerra civil española donde ganó la guerra sin discusión, hasta desaconsejó al presidente de los EEUU intervenir en Vietnam.
 
 
 

Como político era (permítanme una sonrisa al decir esto) un auténtico zorro de la política. Dotado de unas habilidades innatas sin igual. Él y sólo él fue capaz de salir airoso de la situación en la que se encontraba el Régimen al acabar la Segunda Guerra Mundial. Contra todos, aislado, con todo por hacer, con un país devastado y pobre, tachados de nazis y fascistas consiguió salir adelante, consiguió ganarse el respeto de todos. Ése era Franco. El que consiguió mantener a España a flote en uno de los momentos más duros y terribles que ha conocido este país en los que no había ni pan que comer y con la Segunda Guerra Mundial en curso y los alemanes esperando a Franco en los Pirineos, el mismo que consiguió el apoyo de potencias extranjeras durante la guerra civil gracias a su prestigio y habilidades negociadoras, el que con esa misma premisa sorprendentemente consiguió mantener a España fuera de la Segunda Guerra Mundial participando con la División Azul exclusivamente en la lucha contra el comunismo, el mismo Franco que si Alemania hubiera ganado la guerra se habría sumando un día antes de acabarse la contienda a los vencedores para repartirse el botín y conseguir lo mejor para España, el mismo Franco que más tarde consiguió tener a su lado a los EEUU, el mismo que en Hendaya sacó a Hitler de sus casillas y que no se plegó a sus planes cuando toda Europa hacía lo que ese señor quería. Ése era Franco.
 
 
 

Lo de este Señor es para que en cada plaza de cada pueblo o ciudad hubiera una estatua suya, un lugar con su nombre, como hubo durante más de 40 años hasta que los resentidos socialistas y comunistas y la derecha cagona y acomplejada decidieron quitar todo cuanto recuerde a aquel señor, como si nunca hubiese existido, hasta culminar el despropósito con esa aberración zapateril llamada “Ley de Memoria Histórica”. Sin embargo la vileza de los miserables antiespañoles solo hacen quitar todo cuanto queda de aquella época llegando al ridículo. Lo que les interesa claro, porque lo que no les interesa no lo derriban. Franco es el Napoleón francés, y en pleno centro de París hay monumentos a Napoleón, con la diferencia que Napoleón fue derrotado y Franco fue el Caudillo Invicto.  Espero que dentro de muchos años, cuando se pierda la pasión, se le haga justicia.
 
 
 

Le comparan con otros dictadores como Hitler y Mussolini, cuando lo cierto es que no hay comparación posible. Franco jamás invadió ningún país ni hizo pasar hambre a su pueblo mientras el viviera a todo trapo o despilfarrase dinero en estupideces. Franco era diferente a todos ellos. Mucho más humano, sensible. No fue ningún mujeriego ni festivalero. Al contrario que otros como Hitler o Stalin Franco nunca mandó ejecutar a ningún allegado o colaborador. No hay comparación posible. Viajaba siempre en coche porque temía un accidente de aviación como los que sufrieron generales muy importantes durante la Cruzada (Sanjurjo y Mola).
 
 
 

 
De Franco también se ha dicho que carecía de ideología. Que el franquismo no tuvo ideología. Mentira. La ideología fue la del Movimiento Nacional que aglutinó a todas las fuerzas nacionales. El tradicionalismo, la Iglesia y la Falange de José Antonio. Si eso no es tener ideología….De cada movimiento cogió lo que le pareció más útil para construir la España Nacional.
 
 
 

De Falangismo tomó la recuperación del Imperio Español, la idea de nación y sus aspiraciones de justicia social. En cambio siempre rechazó las ideas extremas de la llamada “revolución pendiente”, la revolución nacional-sindicalista, y eso hay falangistas que no se lo perdonan y que hoy siguen zurra que dale con Franco.
 
 
 

Del Carlismo tomó el catolicismo, el antiliberalismo y el tradicionalismo. Desechó la idea de reinstaurar la monarquía carlista.
 
 

De los monárquicos tomó el principio de poder frente a la forma de gobierno republicana. Como él mismo afirmó: “somos una monarquía sin realeza, pero no somos una monarquía”.

El Movimiento Nacional fue un compendio, una suma de movimientos para tomar de ellos la forma más adecuada al modelo de gobierno que Franco buscaba.

Franco no compartió ningún ideal por completo, lo cual tuvo su mérito torear en semejante plaza ya que finalizada la Guerra Civil todo era una incógnita. Cada uno intentó mandar a su manera e imponer sus ideas. Pero con el mayor de los respetos, la falange, los carlistas, los monárquicos, cada cual tenía su cacique o reyezuelo, pero ninguno tenía el prestigio y la autoridad que tenía Franco para mandar sobre el resto y aquello a buen seguro habría terminado como mal. Franco era el único que podía mandar en aquel galimatías de intereses, y la historia le dio la razón, como en prácticamente todo.
 
 
 

Por eso Franco en cuanto aquello se desmadró con jefecillos rebeldes rápidamente puso tierra de por medio, lo cual lo pintan como la autoridad del dictador o la represión incluso en su propio bando. Franco era la autoridad con mayúsculas. Franco era ese padre que te reconoce y premia cuando lo haces bien y te castiga cuando te portas mal.

Franco fue tomando las decisiones que la situación aconsejaba, cambiando como en un motor las piezas necesarias dejando el resto como estaba. Eso hizo que estuviera en el poder 40 años sin que ni siquiera le tosieran un poquito. Tanto Churchill como los americanos le consideraban un mal menor, pero le apoyaron por su anticomunismo. La Iglesia también fue un pilar fundamental para el sostenimiento del Régimen.
 
 
 


Personalmente era una persona muy austera, abstemia, parca en la comida y muy católica. Un hombre devoto, un padre de familia. No era un cultureta, tampoco un filósofo ni un ideólogo como pudo ser José Antonio. Franco era un hombre, por compararlo con alguien de nuestro tiempo, como Raúl el futbolista. Raúl no era un 10 en nada, pero si un 8-9 en casi todo. Así era Franco. No era un gran orador, no era un filósofo, no era una persona con una cultura apabullante, no era un pensador, pero en todo ello llegaba al notable y sobre todo tenía un carisma sin igual. Franco es el vivo ejemplo de que no por ser el más listo de la clase vas a ser el mejor en tu vida profesional.
 
 
 

Amante del cine, del fútbol, de los toros y de la caza y la pesca. También dedicó parte de su tiempo a la pintura. Y no lo hacía nada mal.
 
 
 

Este es el Franco más personal a mi juicio. Una persona cercana, normal, como cualquier español, pero que la vida que le tocó le hizo volverse frío y serio.

 

 
Hoy día todo esto que cuento sobre Franco es prácticamente desconocido. Vivimos en un vacío institucional vergonzoso sobre aquella época y sobre aquel señor que dan ganas de dejar de ser español para nacionalizarse jamaicano por ejemplo. Parece como si de 1939 a 1975 se hubiera parado el tiempo, como si no hubiese pasado nada. Incluso en la reciente proclamación del Rey Felipe VI ni se mencionó el nombre de Franco. Bueno realmente ni se mencionó a Dios….como para nombrar al hombre que instauró la monarquía (digo instauró porque Franco no reinstauró la monarquía, la instauró). De Franco no se habla, y si no queda más remedio que sea para mal, es la premisa que rige en nuestros políticos. Como si la monarquía hubiese vuelto a España por arte de magia cuando en España hay una monarquía porque lo quiso Franco, única y exclusivamente. Y precisamente ahí radica su gran fallo, su gran mancha. No tanto en haber elegido la monarquía como forma de gobierno sino en haber elegido como sucesor a un impresentable, cantamañanas, traidor y mujeriego como es Juan Carlos de Borbón, al que le faltó tiempo para apuñalar todos los principios del Movimiento Nacional.
 
 
 

 

En definitiva, Franco ha sido la persona que más poder ha tenido en España jamás. Pero como digo al inicio jamás abusó de él, siempre supo cual era su lugar, sus responsabilidades y su trabajo era su vida y España su pasión.
 
 
 

Fue admirado, querido, venerado, respetado, aclamado, tratado casi como un Dios. Gobernó España con mano dura pero también con bondad. El famoso ¡Franco, Franco, Franco! resonó durante 40 años allá por donde fue. Si pasaba por un pueblo, por una calle o iba a inaugurar un pantano o cualquier otra cosa el grito era unánime y sincero: ¡Franco, Franco, Franco!. Su mera presencia levantaba el ánimo entre sus seguidores y el temor entre sus enemigos. El Ejército siempre le fue fiel.
 
 
 

Mantuvo la paz y el orden manteniendo a raya a aquellos que llevaron a España al borde del abismo y que acabó en la guerra civil que tanto daño hizo a España. Tuvo a los nacionalistas y los rojos bajo su bota, sin dejarles levantar la cabeza.

 
Para terminar. Francisco Franco fue el gran regenerador de la historia de España. Fue el que hizo pasar a España de la época medieval al mundo moderno. De la España del 36 a la España del 75, en 39 años España da un salto de siglos, cierto es que coincidiendo con el resto de Europa o incluso con cierto retraso respecto a nuestro homólogos europeos, pero aquí nos marginaron y boicotearon y recuperarse de la guerra costó muchísimo trabajo. Su mayor logro fue crear la clase media, sin duda, y no hay mayor justicia social que esa misma, la de redistribuir la riqueza de forma equitativa entre la mayoría, esa es la clase media que creó el franquismo.
 
 
 

Desde aquí quiero recordar sin ningún tipo de complejo ni miedo al anterior Jefe del Estado español, al Generalísimo Francisco Franco quien nos libró en España: del terror comunista instaurado con la II República (dónde el Estado supuestamente democrático permitía el asesinato impune de personas no afines al régimen de la extrema izquierda), de la persecución y el exterminio con saña de la Iglesia Católica y asesinatos de sus miembros, nos sacó de la miseria y los piojos, creó puestos de trabajo, industrializó y modernizó España, se cuidó de que todos tuvieran viviendas dignas, educación y sanidad para todos, trabajo, se aprobaron leyes en defensa de los hombres y mujeres trabajadores (contratos, seguros, subsidios, descansos, bajas y vacaciones retribuidas, pagas extraordinarias, ayuda en los accidentes de trabajo, seguridad social ...), seguridad ciudadana, justicia ... Esta es la verdad que molesta y "algunos" quieren borrar de la historia de España.
 
 
 

 

Personalmente Francisco Franco es la persona de todos los tiempos que más admiro tras Jesucristo. La gratitud y el recuerdo hacia él lo llevo siempre presente, en cada momento, cada día de mi vida siempre hay un momento de recuerdo hacia él, algo que me hace recordarle. Todavía queda mucha gente en España (cada vez menos) que antes de dormirse reza una oración por ese Señor que gobernó en España.
Yo, en confianza lo digo aquí que no me lee casi nadie, cada vez que voy a verle al Valle de los Caídos siempre me susurra desde allí abajo las gracias por ir a verle y me confiesa que le gusta mucho que jóvenes españoles comprometidos con la causa de España como es mi caso vayamos a verle, a contarle cómo está España y nuestros problemas personales. Cosas de fachas. Que le vamos a hacer.

Para mí Paco, Francisco, no voy a decir que sea como un padre, pues un padre formidable ya tengo gracias a Dios. Franco para mi es….ese ejemplo de superación de las adversidades, de ejemplaridad social, de principios sabiendo adaptarse a las situaciones nuevas que surgen a lo largo de la vida. Franco fue sencillamente EL CAUDILLO DE ESPAÑA.

Gracias Paco, gracias por hacer de España UNA, GRANDE Y LIBRE.
 
 
 

 

Ahora, España te espera a ti. El tesoro que Franco te va a dejar es una patria reconstruida y en paz. No ha necesitado ser rey ni presidente de ninguna república para conseguirlo: solo ha necesitado honestidad, valor y capacidad de trabajo. No son virtudes sobrehumanas y todas ellas las debes y las puedes tener tú. Con este libro, he tratado de ayudarte a comparar la España que Franco y nosotros recibimos con la España que Franco y nosotros te dejamos. Deseo que Dios te depare lo que muchos tenemos: un jefe como Francisco Franco. Y ahora, muchacho, adiós. (“Cartas a un joven sobre Francisco Franco”).

 

 

 

PD: a continuación dejo una serie de frases del propio Franco que retratan su pensamiento.

 

"Pido a Dios claridad de pensamiento y fortaleza de brazo para gobernar con equidad y espíritu de servicio"

“El mundo en un mañana próximo comprenderá la magnitud del sacrificio y entonara sus cantos de agradecimiento”

"Mi verdadero monumento no es el Valle de los Caídos, sino la clase media española. Cuando asumí el Gobierno, no existía. La lego a la España de mañana"

Indalecio Prieto: “¿Adónde van esos locos? Nosotros tenemos las principales ciudades, los núcleos industriales, todo el oro del Banco de España, inagotables reservas de hombres, y tenemos la Escuadra. Respuesta de Franco: “Es verdad, ellos lo tienen todo, todo, menos la razón”

 

 

 

"Desde el momento en que los partidos se convierten en plataformas para la lucha de clases y en desintegradores de la unidad nacional, los partidos políticos no son una solución constructiva ni tolerable para abrir la vía española a una auténtica democracia ordenada y eficaz."

 

«El pueblo, como los hombres, no inventa su destino: lo sirve. Y nosotros estamos sirviendo el destino de la grandeza histórica de España (...) y seguiremos fieles a los principios que constituyen el lema de nuestra política, es decir, manteniendo esa base de convivencia entre los españoles que se funda en la firme unión de lo nacional con lo social bajo el imperio de lo espiritual»

 

"Ni el capitalismo liberal es solución para eficacia y resolución de los problemas modernos de los pueblos, ni la estatificación socialista de las producciones, que niega el principio de la libre iniciativa y anula el progreso.

Pero existe una tercera solución:

el Estado moderno que España ha alumbrado, el que estimula la libre iniciativa y defiende la libertad y la dignidad de la persona humana, pero que se siente también propulsor y creador de todo aquello que, por beneficiar al bien común, deba realizarse." 

 

 

"Trabajar con inigualado entusiasmo en la tarea de la propia educación cristiana y española: he aquí la suprema consigna para la juventud en la hora presente. Porque ese trabajo, enmarcado en un espíritu de unidad, es la clave de una España grande y triunfadora, donde por el imperio de la cultura vayamos hacia Dios y seamos todos mejores para su servicio y homenaje”