viernes, 5 de julio de 2019

El suicidio demográfico




Uno de los problemones gordos, pero gordos de verdad, a mi juicio el que más, a los que se enfrenta Europa en general y especialmente España es que no nacen niños. El suicidio demográfico como lo llaman algunos expertos. Y curiosamente apenas si se le da importancia. Propio de sociedades en vías de extinción que han perdido el norte como la actual. Sociedades poseídas por el materialismo y el egoísmo, atrapadas en estupideces vacías, en vicios del sistema, presas de su egoísmo. No se le pueden pedir peras al olmo.






Creo que es un tema muy complejo y yo voy a dar mi opinión.

Creo que la gente no es consciente de que España y Europa como país, sus gentes, su cultura, puede quedar exterminada en cuestión de una o dos generaciones a lo sumo, y estamos hablando del año 2050 por ejemplo, que es pasado mañana para que nos entendamos, no estamos hablando del año 2300, ya que entre que no nacen niños españoles ni apenas europeos y la mitad de los niños que nacen son hijos de inmigrantes, y perdónenme pero esos NO SON ESPAÑOLES ni europeos, pues el hábito no hace al monje, España y Europa pueden desaparecer tal cual la conocemos hoy en 40, 50 años, un tiempo récord. 
En resumen, o nacen niños o estamos condenados al desastre absoluto. Y por desgracia nada hace pensar que la tendencia vaya a cambiar. La realidad cruel es que los españoles autóctonos estamos en retroceso preocupante. Solo hay que salir a la calle para ver la media de edad. Solo hay que ver sistemáticamente cada uno de Enero que el primer nacido del año siempre es hijo de un marroquí o de sudamericano, o que entre los niños de San Ildefonso el día de la lotería de Navidad no hay niños españoles. Me parece gravísimo.




Me parece un tema capital, un problema de Estado que junto al paro y los bajos salarios, las pensiones, la inmigración y la despoblación que sufre España debería ocupar el debate político. En el fondo muchos de esos problemas se solapan, se tocan y están plenamente interrelacionados.

Pero en la sociedad lanar en que vivimos, borrega, plagada de estúpidos, amariconada por tontiloca, roja, materialista, egoísta, vacía, gobernados por unos políticos ineptos que son auténticos miserables y desgraciados y que no por serlo dejan de ser una representación de la sociedad a la que mal gobiernan, es mucho mejor estar todo el santo día hablando del engendro del feminazismo, de la memoria histórica, de la violencia de género, de Cataluña Cataluña y más Cataluña, de desenterrar a Franco y de la violencia de género otra vez y de cuan salvajes somos los hombres que por diversión maltratamos y matamos a las mujeres, así en general. Y así todo el santo día las 24 horas del día los siete días de la semana con la picadora de carne encendida en la caja tonta. Resultado: la sociedad borrega que tenemos hoy. Deplorable, injusta, egoísta, engreída, faltona, carente de valores....podría seguir y no acabar. 






Recientemente España registró la cifra más baja de nacimientos ¡desde 1941! Previamente ya habíamos registrado más muertes que nacimientos. Basta comparar la España de 1941, devastada por la guerra civil, en plena Segunda Guerra Mundial en Europa, con cartillas de racionamiento y alumbrándose a la luz de una vela, y la actual que es un engendro pero no tiene nada que ver gracias a Dios con aquella. A principios de 1900 en Europa incluyendo Rusia se concentraba el 25% de la población mundial. Hoy vamos por el 10 y bajando.
En África hace 100 años gran parte del territorio era selva, y hoy el 90% del territorio tiene cobertura para telefonía móvil. Estos datos dicen bastante. En Europa la gente no tiene hijos, y en África cada mujer tiene…todos los hijos que pueda engendrar, y digo engendrar y no mantener. Luego te vienen las ONGs echándote anuncios conmovedores de niños negros cuyo brazo parece una salchicha de fina. Manipulación y mentira en cantidades industriales diseñada por expertos en la materia para zarandear las conciencias de una sociedad tonta y estúpida que ha perdido la razón y que esta basada puramente en sentimentalismos.




Hemos pasado de 677.000 nacimientos en 1976 a 360.000 en 2015. Hacía más de 200 años que no se daba una cifra tan baja en España, con la salvedad que hace 200 años la población española era cuatro o cinco veces menor que la actual. Con una tasa de natalidad tan baja cada nueva generación de españoles es un 40% menos numerosa que la anterior. Es para llevarse las manos a la cabeza y tocar las campanas en señal de alerta. Y lo peor es que a partir de ahora me temo que el número de defunciones superará años tras años con creces al número de nacimientos. Este dato lo usarán los de siempre, de izquierdas y de derechas, para seguir vendiéndonos la idea de que es necesario que sigan llegando negros, chinos, rumanos, moros y sudamericanos a nuestro país y a toda Europa.




No han faltado a la cita los buitres carroñeros que han acudido raudos y veloces al olor de la putrefacción para utilizar en su propio beneficio político tal drama para sacar de ello la sustancia del populismo y extenderla por la sociedad como un reguero de mierda que ensucia y pringa a todos. Y ya sabes….si les llevas la contraria: facha, nazi, ultraderechista, cavernícola, xenófobo, etc…

Aquí es cuando viene el entendidillo dándoselas de listo hablando del problema demográfico en relación a las pensiones el día de mañana, cuando permítanme que les diga, las pensiones son un problema muy gordo, pero no son el mayor problema, de hecho son la consecuencia de otro problema, el demográfico. 
En el fondo el que resume el problema demográfico en las pensiones solo demuestra sin darse cuenta el tremendo egoísmo que rige hoy en la sociedad. En el fondo al 90% les importa un higo si nacen o no nacen niños, el tema es "y que hay de lo mío". El otro día cenando en casa viendo de pasada la basurilla esta de First Date salía uno diciendo que el la única religión que entiende es la del dinero. Esto es lo que hay desgraciadamente.

Creen en su ignorancia, en su egoísmo descarado y en lo que han oído por la tele (la sexta, la cuatro y TVE tele psoe) que el mayor problema de la falta de jóvenes es quien va a pagar las pensiones cuando ellos se jubilen y que por eso han de seguir llenando España de negros, moros y sudamericanos, ahora con la excusa de que todos son refugiados cuando realmente son inmigrantes, o migrantes como dicen ahora . Sí, las pensiones es un problema, y gordo, pero al lado del fin de la sociedad española y de la cultura cristiana tal cual la conocemos hoy pues que quieren que les diga las pensiones no me parecen el primer problema, de hecho el problema de las pensiones son la consecuencia de la pirámide demográfica invertida. ¿O acaso cuando uno tenga 75-80 años, este en la vida más solo que la una porque no tiene hermanos ni ha tenido hijos ni sobrinos que vayan a verle, le va a importar mucho su pensión? Es que mucha gente no le da importancia a este tema o se piensan que van a gozar de una salud estupenda hasta los 90 años y que luego como no se va a enterar de nada qué más da lo que pase.

¿Y qué me importa a mi, si me voy a haber muerto para entonces? Claro, en una España cortoplacista y egoísta es difícil ver lo que va a pasar mañana y total “a mi que me importa lo que suceda dentro de 50 años si yo voy a estar muerto para entonces”. Misma filosofía que el que va tirando latas de cerveza vacías cuando va al campo. Destruyamos el planeta y los que vengan detrás que se jodan.




¿Será posible mantener el nivel de vida, el crecimiento económico, la creatividad, el desarrollo, etc.. en una sociedad que dentro de unos pocos años habrá más personas mayores de 65 años que menores de 35? ¿Cómo será la política de un país donde la mayoría son los jubilados? ¿Y las empresas? Todo con el agravante de que además de tener una población en edad laboral menguada, cada vez hay más paro y lo peor de todo, se trabaja por menos, con sueldos ridículos que no permiten progresar en la vida, yo mismo lo he sufrido ¿qué futuro nos espera así? Y encima hay borregos que creen que la solución es el socialismo, esos unos, y otros creen que es el comunismo, los peores. De los antisistema ya ni hablo.
Los problemas sociales que estamos viendo de supuestos “españoles” nacidos aquí y criados aquí en España, y donde digo aquí puedo decir Francia, Alemania o Italia, hijos de inmigrantes, que de franceses, alemanes, italianos o españoles por mucho que hayan nacido y se hayan criado en estos países, de nativos, de europeos y occidentales no tienen nada. El hábito no hace al monje. Y estos son los que dicen que vienen a pagar pensiones y a rellenar los huecos de los hijos que no queremos tener.




¿Razones de la baja o nula natalidad? Muchas a mi entender. Estas son las que se me ocurren.

- Yo creo que la primera razón por la que no se tienen hijos hoy es por pura comodidad y por egoísmo, por encima incluso del “no puedo mi sueldo no da para más”. Las preferencias de la gente han cambiado.
Antes la autoridad de los padres sobre los hijos era mucho mayor (hoy hemos pasado como con todo al extremo opuesto). Antes la preferencia era tener un trabajo que te permitiese salir de casa para hacer tu vida, casarte y tener una familia. Si antes preguntabas a una chica joven que cual era su meta en la vida la respuesta era tener una familia, una casa, un trabajo, por defecto, sin pensarlo, era la inercia. Hoy la cosa ha cambiado radicalmente en la sociedad de consumo en la que vivimos. Hoy la preferencia es tener un coche y si puede ser un cochazo aunque tengas que tenerle el seguro a terceros porque no tienes ni para echarle gasolina, tener un móvil acojonante último modelo e irle cambiando cada año aunque te suponga dos meses de salario, tener un apartamento en la playa, salir a cenar al restaurante de moda o de fiesta cada fin de semana sin privarse de nada,irse al concierto del cantante del año que viene a tu ciudad o al festival más famoso del verano, irse de escapada de fin de semana una vez al mes por lo menos, estar a la última a nivel tecnológico, e irse de vacaciones en verano. Pero no irse de vacaciones al pueblo, a Benidorm o a Canarias, no no, irse de vacaciones a Tailandia, a Vietnam, a EEUU, a China. Viajes muy caros y hace poco impensables para cualquier persona normal. Claro, todo no se puede tener en la vida. La realidad incómoda que prácticamente nadie cuenta se resume en la siguiente frase: los hijos no entran en nuestros planes. Tener hijos significa renunciar a muchísimas cosas, y en la sociedad que vivimos hoy mucha gente no esta dispuesta a renunciar a esas cosas, empezando porque antes con cuarenta o cincuenta años eras viejo y hoy dicho comúnmente con cuarenta años estas hecho un chaval por no decir que alguno aun no se ha ido de casa de sus padres, que hay que echarle pelotas…




Vivimos en una sociedad capitalista, a veces diría ultracapitaista, de consumo, donde te han vendido y convencido de que “puedes tenerlo todo”. De hecho cuanta gente y cuantas familias han sustituido una forma de ocio que era ir al campo en familia, salir con la bici, hacer senderismo, ir a ver a los abuelos, salir a pasear, ir al pueblo etc… por meterse toda la tarde en un puto centro comercial. Como dice Homer Simpson: para pasar el día ve al centro comercial, hay comida y moda y diversión sin igual. Pues eso. Lamentable.




Nos han vendido que todo es posible, que has de facilitar la mejor educación a tus hijos, que has de tener un trabajo cojonudo muy bien pagado, que has de cumplir con tu pareja, ayudar a tus hijos con los deberes, viajar y disfrutar de la vida, etc…Esto ES MENTIRA. Es mentira y hay que decirlo así, no es más que el producto de una sociedad de consumo agilipollada manejada por las grandes empresas que nos han convencido de que es prácticamente imposible vivir sin sus productos, que has de matarte a trabajar y endeudarte si es necesario para disfrutar de sus productos, y si vives sin ellos además de un ser raro vas a ser un infeliz, ¿y quién quiere ser un infeliz en un estado de bienestar? Yo mucha veces con mi mujer he tenido discusiones porque a ella como a muchas mujeres la encanta ir ocho veces al centro comercial. Una a ver, otra a ver otra vez, otra a comprar y una última a devolver lo que no me queda bien. A mí me gusta ir un día, pero no meterme allí por sistema como forma de ocio porque además creo que no es bueno. Y aquí viene el que dice, ya pero no hace falta gastar. Palmadita en la espalda: el dinero va y viene amigo, lo que no vuelve jamás es tu tiempo gastado. En mi opinión lo peor no es el dinero que te gastas, sino el tiempo que te roban que jamás volverá, las horas y horas que gastas, que quemas de tu vida, absurdamente, entregada gratis a estas multinacionales cuyo fin es ganar dinero.






No se puede tener todo en la vida. La realidad de la vida es que la vida es elección y hay que priorizar. Mi padre me lo dejó claro desde pequeño: aunque tú no te des cuenta continuamente estas eligiendo. Hay elecciones menores y elecciones trascendentales en la vida. 
No se puede tener un puestazo de trabajo de director de una gran empresa y estar en tu casa a las 6 de la tarde para ayudar a tus hijos y preparar la cena, y tener un cochazo, y un apartamento de la playa siendo cajero de un supermercado.Todo ello requiere grandes cantidades de dinero…y de tiempo. Y los hijos requieren ambas cosas: tiempo primero y dinero después.
Si tienes un buen trabajo con muy buen sueldo seguramente trabajarás muchas horas y cuando llegues a casa a la hora de la cena desde las siete de la mañana que te has marchado aun te tocará encender “un momento”( media hora) el ordenador. Y como estoy hasta las narices me hago una pizza al microondas y ya esta. A un niño ni le puedes dedicar media hora al día porque no es una mascota ni le puedes hacer comistrajos, no le puedes estar dando pizzas precongeladas de cenar ni le puedes tener solo todo el día. Tampoco me parece bien y es una opinión totalmente personal encaramar los hijos a los abuelos. Si con suerte estas en casa a las 6 o las 7 de la tarde el chiquillo ha salido del colegio a las 3 ya no te has puesto a hacer los deberes con él. Y claro, a las 8.30 o 9 te tienes que poner a hacer la cena que además, la tele y los expertos lo han dicho, ha de ser tradicional, casera, con los mejores productos, etc… para ello hace falta ir a hacer la compra a mercado. ¿Cuándo si no tienes tiempo para nada? Es IMPOSIBLE. Así de simple.






Como ven es imposible. Esto no existe lo siento. Se está engañando a la gente y se la ha hecho cambiar las preferencias de lo que verdaderamente es importante. Y en la vida hay que elegir, o te vas de viaje por la costa Oeste de EEUU veinte días o tienes tres hijos, ambas cosas lo siento no se puede, y habrá quien diga que sí y que lo ha hecho, es su opinión respetable, pero la mía es que no se puede, y lo dice una persona que en su viaje de novios se fue 20 días a la costa oeste de EEUU y que en este momento es padre de una niña de casi seis meses.

Hace años se veía el tener muchos hijos como una forma de perpetuar la especie y la familia a la que pertenecías. Hace años en un mundo rural y agrario tener hijos era garantía de que te iban a ayudar en las labores del campo y que en tu vejez te iban a mantener y a cuidar. Hoy a los hijos se los ve como una carga, una carga incómoda diría yo, un gasto de dinero.

El suicidio demográfico es una falta total de valores que representa fielmente la sociedad de inmorales y de mentes vacías en que vivimos. Se trata de querer tener hijos, anteponer tener hijos, con lo que ello implica, desde el embarazo de la mujer y todo cuanto supone, dar a luz a una nueva vida, a un ser humano, frente a las comodidades materiales y al dinero, el poder social y tu posición profesional. Supone SACRIFICIOS Y RENUNCIAS con mayúsculas. Formar y mantener una familia debe ser un deseo prioritario para los adultos jóvenes y no algo secundario de tipo ya veremos el día de mañana, a ver cómo me van las cosas, aun es pronto (pronto con 35 años).





Resulta que te encuentras con mujeres que han priorizado viajar, progresar en sus trabajos, divertirse, y cuando se dan cuenta o se quieren dar cuenta tienen 35 años y ya no es tan fácil ser madre, porque por mucho que te vendan que eres muy joven la naturaleza sí tiene sus tiempos y plazos. Y entonces qué ironía todo aquello que has ganado para viajar, pagar la casa, tener un buen coche, vestir buena ropa, resulta que es secundario porque tu sueño es ser mamá y has de pulirte una millonada en la clínica de fertilidad de turno a ver si hay suerte. Seis mil euros cada intento. Y ser madre con 40 años no es como ser madre con 23, porque el cuerpo no es el mismo a una edad que a otra. Y de nuevo habla el padre de una criatura de cinco meses y medio.





- Otro aspecto relevante es que cada vez hay menos mujeres españolas en edad fértil. En relación a lo anterior los hábitos han cambiado. Donde antes tu madre con 26 años ya tenía tres hijos y tu padre llevaba diez años trabajados hoy con 26 años has acabado o estas acabando la carrera, con suerte tienes tu primer trabajillo de becario por el que no cobras nada y encima te tienes que meter en un máster que vale una pasta para poder tener un puesto medianamente bien remunerado (que por supuesto requerirá gran cantidad de horas de dedicación). Claro cuando quieres empezar a vivir con un sueldo normal tienes 32 años. Vuelvo a lo de antes, para los nuevos tiempos es una persona joven, pero que te vendan que eres un chaval no cambia los tiempos y plazos de la naturaleza.
La incorporación de la mujer al mercado laboral es clave en todo este asunto.






-Otro asunto no menor es la cultura de la muerte implantada en la sociedad y en esta cultura postmodernista tontoprogre, amariconada LGTBI y anticristiana. Yo desde luego soy un defensor de la vida, pero también de la paternidad responsable. Yo no puedo tener quince hijos si no les puedo dar a todos por igual la mismas oportunidades, y por oportunidades no quiero decir todos pobres y todos a trabajar con 16 años. Quiero decir darles un futuro, poder llevarles a la universidad si quieren estudiar, regalarles un futuro para que se puedan ganar la vida dignamente el día de mañana igual que mis padres lo han hecho conmigo y mis dos hermanos, dedicarles el tiempo que merecen, poder pagar un dentista y poder darle al chico 20 euros el viernes de paga. En estas condiciones es obvio que no puedo tener ocho hijos, quizás solo pueda tener dos.

-Otro tema es la situación de ruina, de salarios míseros y de negación sistemática de derechos básicos como poder adquirir una vivienda. En el fondo es solo una excusa a medias, porque nuestros abuelos eran más pobres y tenían hijos, a veces muchos hijos. Lo que pasa es que la excusa económica es una excusa que nos quita de responsabilidades, y nos viene muy bien. Yo la he usado y la defiendo, pero es cierto que muchos de los que la usan si mejorase su situación económica tampoco tendrían hijos.

Como decía hoy se ha implantado la cultura de la muerte. Hoy se usan múltiples métodos anticonceptivos cuyo fin, no lo olvidemos, es poner una barrera a la vida, a la fecundación. Pero es que más allá de estos métodos anticonceptivos viene el negocio de las clínicas abortistas. Hoy el aborto es considerado algo normal, como el que elije trabajar en repuestos Paco o en caramelos Antúnez. Es habitual en cualquier serie de televisión o película que una chica “joven” se quede embarazada y su primer dilema sea si tiene el niño o aborta. El aborto contemplado como una opción sin más, como el que baja a comprar el pan y de paso compra mermelada, sin malformaciones ni riesgos, abortar sin más, porque sí, porque no quiero ser madre, porque con 28 años tengo toda la vida por delante para disfrutar. Sentimiento de culpa: cero. Conocimiento de lo que acabas de hacer (asesinar a tu propio hijo en tu propio vientre): déjame en paz y no me rayes, con mi cuerpo hago lo que quiero. Ante esta cultura demoníaca uno ve los datos de abortos en los países llamados civilizados y se echa a temblar.
Eso en la cultura de la muerte, pero también podríamos hablar de la cultura del mariconismo que atenta frontalmente contra la familia y sus valores.







Una sociedad tan estúpida, egoísta y cortoplacista merece extinguirse. La gente solo piensa en el aquí y ahora. A mi me dan pena todos aquellos que el día de mañana en su vejez van a estar SOLOS tirados en una residencia con un paña empapado de pis esperando a morirse, y con suerte irán a verles una vez al mes sus sobrinos si es que los tiene y se dignan a ir a verles. La situación va a ser tristísima.

Un día con un compañero del trabajo, iba a decir que tuve una pequeña discusión pero ni eso se puede llamar porque fue una conversación sin más, en el que me decía que a mi me quedaban cuatro días para ser padre, y yo en tono de humor le contesté que alguien debería cuidarme de mayor, a lo que él replicó que al final con hijos o sin hijos me acabaría tirando a la basura siendo cuidado por una sudamericana. Él expresó su voluntad y la de su pareja de no tener hijos y de disfrutar la vida, y que para ello ya habían puesto remedio, no hace falta explicar más.
A mi esta actitud me parece, por un lado respetable, cada uno elige lo que quiere hacer con su vida, de otro lado según que personas hasta de agradecer que no vayan a tener descendencia, y por último como ya he dicho más arriba me parece tremendamente egoísta y cortoplacista. Si sus padres hubiesen hecho lo mismo ellos no existirían. Esto es lo que hay señores.





Otro hecho bastante representativo de la sociedad en que vivimos es el siguiente, y seguro que ha mucha gente le va a molestar, porque es una verdad incómoda, pero como aquí en total libertad y respeto digo lo que pienso me da lo mismo.
Hay mucha gente que vive sola o que no tiene pareja, gente ya de treinta y pico y cuarenta, algunas de ellas han tenido mala suerte en el amor, otras sencillamente no se aguantan ni a si mismas con que menos les va a aguantar otra persona, y muchas de esas personas para suplir sus carencias afectivas adoptan generalmente un perrito o un gatito como sustituto de su hipotética pareja o de su hipotético hijo o hija. En el pobre animalillo se vuelcan tratándole como si de una persona se tratase dándole todo tipo de cuidados, amor y cariño sin escatimar en gastos.
Es algo que me choca especialmente, la estupidez y la subnormalidad de seres que están más solos que la una y para suplir esa falta de afecto y de compañía sin entrar en razones vuelcan todo su amor en una mascota tratándola como si fuese una persona, un ser humano.
Que nadie me malinterprete, claro que se puede tener mascota siendo soltero, faltaba más, pero lo que no puedo entender es que a esa mascota se le trate con un amor desproporcionado y que se le trate como si fuera una persona, porque una mascota es eso mismo, una mascota, un animal, y si le tratas como a un ser humano le estas arrebatando su ser de pertenencia al reino animal. Y luego el tema de fondo, que estás más solo que la una y rellenas ese hueco con una mascota. Es bastante triste, pero allá cada uno.






Esta demostrado que el ser humano cuanto mejor vive más se aleja de sus instintos primarios. No solo procrear, sino matar, robar agredir, etc…Por algo no es casualidad que en los países más desarrollados no solo la cifra de natalidad sea muy baja, sino de asesinatos por ejemplo.

Vivimos en un país en declive por el deterioro continuo de su capital humano tanto en cantidad (número) como en calidad (una España de viejos), con unos problemones tremendos como el paro, los bajos salarios, las pensiones, la deuda pública, la sanidad, etc…Y eso por no hablar de la degeneración moral y la pérdida total de principios de una sociedad española y europea que ha perdido el norte, con unos políticos miserables cuya única solución al suicidio demográfico es llenar Europa de inmigrantes. Pero no de inmigrantes de provecho (migrantes como dicen ahora los dictadores de los políticamente correcto), nada de gente con estudios, la criba es cero, aquí entra cualquiera. Y estos tienen hijos como conejos aunque anden medio desnudos por la calle sin nada que comer.




La sociedad que nos espera va a ser atroz y mucho menos humana. Porque por ejemplo yo pienso (de vez en cuando pienso incluso) que mundo futuro vamos a tener donde hoy no nacen niños y los que lo hacen son muy pocos, por ejemplo el día de mañana donde hoy tienes siete primos, doce tíos, cuatro abuelos, dos padres, dos hermanos, cinco sobrinos, etc…el día de mañana vas a tener un primo, un tío un tío, ningún hermano, millones de personas morirán solas en residencias sin que nadie vaya a verles porque no tendrán ni hermanos ni hijos ni sobrinos. Muchos se morirán y no habrá nadie que se ocupe de su entierro porque de verdad no tendrá a nadie que se haga cargo de él. Gente sin familia o sin apenas familia. No se a ustedes, a mi me parece un mundo atroz, terrorífico, inhumano, salvaje, frío. Viviremos en un mundo de una soledad y una pobreza afectiva sin igual, de una crueldad absoluta. Y eso tendrá consecuencias, no lo duden. Consecuencias de falta de humanidad, de educación, de civismo, de suicidios, de asesinatos, de vicios, de depresiones. Buen sector para invertir, el de las farmacéuticas que hacen antidepresivos.






Otro aspecto y ya lo estamos viviendo, pero en el futuro vamos a estar gobernados por una democracia gerontocrática, dicho en palabras vulgares, el centro del debate político va a ser la gente mayor, el jubilado, porque va a ser la población más numerosa, por tanto los que van a elegir a los políticos y lógicamente lo harán en función de sus intereses ( las pensiones y los recursos de que se les doten). Échale guindas al pavo lo que puede venir. Esto va a suponer otra vuelta de tuerca aun mayor en la degeneración política, el populismo y la demagogia, y todo apunta a que se va a exprimir hasta límites delictivos a la clase trabajadora, lo cual puedes suponer la asfixia definitiva de la economía aparte de una injusticia tremenda. Otro día hablaré de las pensiones. Si ya me quitan una salvajada de dinero de aquí a veinte años que me quiten directamente mi nómina íntegra. Todo ello es consecuencia o gran parte de ello de la baja natalidad.
Aparte una España y una Europa envejecida quedarían reducidas a la irrelevancia política, la pérdida de importancia a nivel mundial en beneficio de lo que hoy la progresía llama países emergentes antaño llamados países del tercer mundo.
Como ven, hacerse viejo es algo innato propio de la naturaleza, pero un mundo de viejos, de ancianos, no es sostenible sin sangre nueva, joven y fresca. Al igual que nuestras sierras y bosques necesitan savia nueva, sino el bosque también envejece, y eso no es bueno.

Estamos inmersos en un escenario terrible de suicidio demográfico. Una muerte colectiva como pueblo, a cámara lenta pero inexorable, producto de nuestro propio egoísmo, nuestra propia estupidez y nuestra propia infecundidad voluntaria, que tiene cojones. Yo recientemente acabo de ser padre, y ya me gustaría que hubiese sido mucho antes pero las circunstancias deplorables que he tenido que vivir lo han hecho imposible y cuando digo circunstancias deplorables no hablo de tener un trabajo de 800 euros, hablo de no tener dinero ni para tomarme una coca cola. En cuanto he tenido un trabajo fijo, un buen sueldo, ha llegado mi hija que es lo más bonito que me ha pasado en la vida y por lo que doy gracias a Dios cada noche.





Para revertir esta situación, como el estudiante que lleva un mes diciendo que se pone a estudiar para el examen y nunca se pone y cuando quedan cinco días necesita una empollada descomunal, Europa necesita un renacimiento demográfico urgente. Poniendo negro sobre blanco los expertos dicen que necesitaríamos 250.000 nacimientos cada año para que exista un relevo generacional, lo que se traduce en 2,1 hijos por mujer, cuando actualmente estamos en 1,3. De mis amigos, por mi parte y de mi mujer, la mayoría no tienen hijos. De hecho la mayoría ni se han casado. Ni idea que tienen ni de casarse ni de tener hijos, y eso que hoy nadie te mira mal por tener hijos sin estar casado. Tengo otros amigos que son padres, que les gustaría ampliar la familia, pero con un solo sueldo y bastante normalito no pueden permitirse otro hjo. Ni otro hijo ni comprarse una casa ni un coche más grande...

Pero este problema no va a tener solución mientras no se le dé a nivel social la importancia que tiene, que es todo, primordial, totalmente prioritario. Si pusieran la mitad de énfasis en hacer publicidad de este problema que en martillear a todas horas con la clásica bazofia política desde Franco a la violencia de género pasando por el Torra, ya tendríamos puestos los cimientos.
Hacen falta políticas de apoyo reales a las familias en vez de tanto mariconismo y tanto orgullo gay, políticas de ayudas a las madres y a las familias. No se ayuda a las madres a ser madres, porque cuatro meses de baja para la lactancia es una ridiculez absoluta. El hombre no puede hacer muchas cosas, yo no puedo dar el pecho a mi hijo, y si ya el hecho de ser madre implica una serie de sacrificios tremendos de malestar en el embarazo, dietas, médicos, etc…al dar a luz implica una desconexión laboral y renunciar a muchas cosas. Por eso hacen falta políticas y ayudas reales para las mujeres, desde las bajas por embarazo, porque si te descuidas algunas dan a luz en la oficina, y eso me parece intolerable, a prolongar la baja por maternidad, por ejemplo desde mínimo un año y medio hasta cuatro, a elegir por la madre. Para esto hace falta voluntad de fomento de la natalidad y dinero, claro. Pero es mucho mejor emplear miles de millones de dinero público en las televisiones basurientas para seguir haciendo publicidad de la escoria política, es mejor seguir regalando millones de euros no a los catalanes sino a los independentistas, es mejor seguir gastando miles de millones de euros en líneas de alta velocidad infrautilizadas y así todo.
Hace falta que los hijos vuelvan a ser un valor y no una carga.





Oigo con desprecio a los policastros especialmente de la izquierda diciendo por ejemplo el desgraciado de Pedro Sánchez que iba a aumentar la baja por paternidad al padre porque el hijo es cosa de dos. Que estúpido, ni al borde del precipicio dejan de lado la mierda de la política y el populismo. Lo que hay que alargar es la baja de la madre y mejorar su seguridad laboral y sus derechos, y asumir de una p… vez que los hombres y las mujeres somos DISTINTOS. Y que si yo no puedo parir un hijo o darle el pecho no es porque un grupo de personas se reuniesen en la antigüedad y decidiesen que iba a ser la mujer la encargada de dar a luz a una nueva vida.
Claro, metido todo lo que he expuesto desde el principio en una coctelera, que quieren que les diga, el cóctel sabe que apesta, porque es imposible que sepa bueno.

Yo me niego en rotundo a que para que Europa no se extinga haya que meter a millones de inmigrantes en nuestros barrios, que es tanto como exterminar Europa y nuestra cultura. Lo siento, creo que el multiculturalismo ya está demostrado ha sido un fracaso absoluto. Me niego a seguir recibiendo flujos migratorios masivos y continuos bajo tontas excusas como la solidaridad y la garantía de las pensiones. Aunque quizás haya gente muy poderosa detrás de todo esto con unos claros intereses de destrucción de la cultura occidental y de las naciones donde esta rige.






Yo he sido padre hace seis meses, y puedo afirmar sin ningún temor a equivocarme que es lo más bonito que me ha pasado en la vida. La alegría que dar ver a tu hijo o hija, verles como crecen, como cambian, como se ríen y como se alegran cuando te ven, como se dan la vuelta haciendo la croqueta, como empiezan a coger cosas y llevarse todo a la boca...es maravilloso. También es duro, durísimo, es el mayor cambio que puede sufrir la vida de una persona, mucho más que pasar de ser estudiante a ser un currante, mucho más que dejar el seno familiar para independizarse, mucho más que convivir con otra persona. Pero...volvemos a los inicios, supone sacrificar la comodidad para darle TODO a un ser diminuto de 50 cm y 6 kilos de peso. Benditos 50 cm y 6 kilos.
Como dice Juan Manuel Serrrat en su canción "esos locos bajitos" hay que domesticarlos por su bien para que el día de mañana sean personas honestas y útiles para la sociedad de la que van a formar parte. Todo ello es tiempo, dinero y sacrificio, muchos sacrificio y renuncias. Por ello la pregunta no es ¿cuántos hijos te gustaría tener? sino ¿ a que esta usted dispuesto a renunciar para tener hijos?

Hay otro aspecto a tener en cuenta a mi modo de ser. Un hijo es el testimonio vivo de tu paso por la existencia, es tu legado al futuro, es la continuación de tus antepasados, de tu linaje. El que no deje nada salvo que hayas inventado algo o seas una persona notoria, si eres un mindundi como el 98% de la sociedad el día que mueras habrás caído en el olvido y tu paso por la humanidad será NADA. En el fondo es una cuestión de continuar el legado, de los que te precedieron y de los que estarán por venir, continuar la cadena gracias a la cual tu existes. Un hijo es el testamento vivo de tu paso por la vida. No me parece asunto menor.






Cuando salgo a la calle, y voy terminando, y veo a viejecitas, encorvadas, con un bastón, arrugadas, con el semblante del que se ha dejado su vida en precisamente salir adelante en la vida frete a todas las dificultades, solo me merecen ternura ,admiración y gratitud. Mujeres que han tenido tres, cuatro, cinco hijos, diez, doce, y hasta más. Esas mujeres tienen ganado el cielo. Mujeres que han sido amantes, esposas, amas de casa, trabajadoras, que en no pocos casos han sacado adelante ellas solas a un equipo de fútbol de hijos, dándoles lo mejor que han podido. Son mujeres devoradas por la vida, machacadas por la vida, pero con la conciencia tranquila y la cabeza bien alta de que han hecho lo correcto y han hecho lo que han podido, que seguro no ha sido poco.
Y frente a estas mujeres, que lo más que han viajado es una vez en su vida a Benidorm en los años 80 se encuentra la loca feminista de 21 años, fea como ella sola, amargada, amorfa, enemiga de todo, de todo lo que sea algo honesto y bueno, y amiga de todo lo satánico y lo degradante. Que pena de sociedad que además de ir con paso firme al precipicio encima se siente orgullosa de ello.

La escasa natalidad es el más claro síntoma y el mayor problema de una sociedad en proceso de descomposición.

Me quiero despedir con una frase y es la siguiente:

La sociedad y la civilización no son una herencia, son un triunfo.